No me canso de decirlo: amo el verano. Y una de las cosas que más me gusta es poder ir a la playa en plan de relajo y nadar en el mar para aprovechar ese calor rico de esta época. Con esto en mente, me puse a pensar en las mejores playas a las que he ido y, ya sea para fantasear o para planear sus próximas vacaciones, aquí les comparto mis favoritas.
Phi Phi Island, Tailandia
Para mí, es la mejor playa que a la que he ido. ¡Es realmente maravillosa! Después de la casa de mi familia en Brasil, es el lugar donde más me he relajado y disfrutado. Lo más entretenido, es que como Tailandia es un archipiélago, uno se mueve en barcos. ¡Eso me encantó! Es muy distinto a moverse en auto por horas y hace que todo sea tanto más especial. La gente en Phi Phi Island es increíble, todos muy relajados y alegres. Además, se repira una onda de descanso y desconexión que no me ha tocado experimentar en ninguna otra parte del mundo. Poder andar en bikini todo el día, sin maquille, despeinada y que todos estén igual que tú, es realmente increíble.
Miami Beach, EE.UU.
Otra playa que me encantó fue Miami Beach. Eso sí, no tanto la playa en sí misma, sino que todo el relajo de las personas que andan por allá. Todos andan sonriendo, felices y echados en la playa bronceándose (¡porque allá se broncean de verdad: quedan súper dorados!). Además, hay oferta gastronómica para todos los gustos, incluso frente a la misma playa, por lo que es súper fácil salir del agua, comer algo rico y luego volver al sol. Si bien es un destino más tradicional, me da la impresión de que Miami tiene una mala fama de ser sólo un lugar superficial y que vale la pena sólo por sus compras. Por supuesto que hay mucho de eso (ahí está el mall más grande de EE.UU., el Sawgrass Mills), pero Miami además tiene una escena cultural muy diversa y entretenida que te dará mil panoramas cuando no quieras más playa o simplemente el sol se haya escondido. Si eres menos de ciudad, entonces te recomiendo los Cayos al norte y sur de Miami, que comparten las playas paradisíacas con un toque mucho más tranquilo.
Playa del Amor, Brasil
Si pensaron que no iba a destacar las playas de mi natal Brasil es porque simplemente no me conocen. Las playas brasileñas son una maravilla: el agua es calientita, la gente es súper simpática y se vive una alegría increíble las 24 horas del día. Me gusta mucho salir a trotar temprano, como a las 6:00am y encontrarme con muchas personas que también salen para disfrutar del sol, el calor y el deporte. ¡Como buena brasileña, me encanta! Mis playas favoritas están más al norte, pero hay una a la que fui con mi familia hace dos años y sencillamente me fascina. Es conocida como la Playa del Amor. Ahí se junta el mar con el río Amazonas, lo que hace que el agua sea dulce y muy tranquila. Ideal para un relajo extremo y para quienes van con hijos.
Viña del Mar, Chile
Por supuesto que no iba a dejar fuera de mi listado a las playas locales. Y es que bueno, uno no puede venir a Chile y no ir a Viña de Mar. Amo las playas de ahí, siempre llenas de gente, tanto de chilenos como de extranjeros. Lo que sí, hay que ir con harto protector solar porque por más que quieras broncearte, los rayos UV en la zona central son muy fuertes. Algo que siempre he oído que le critican a Viña, es el agua helada que es propia de esta parte del país. Pero la verdad es que yo le agarré el gustito, porque con el calor que hace en el verano, una zambullida en el Pacífico viene súper bien, ¿no?
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